– Rubén Moreira, coordinador del PRI, consideró que el Plan Michoacán es insuficiente y no va a funcionar.
Redacción – Xalapa, Ver.; 4 de noviembre de 2025.- Con sombreros texanos manchados con color rojo, como salpicados con sangre, la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) encabezada por su coordinador Rubén Moreira Valdez entró al salón de sesiones como “símbolo de protesta” por el asesinato del presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo Rodríguez.
Uno a uno de los legisladores del tricolor colocaron sus texanas en los micrófonos de sus curules, mientras terminaban de afinar el orden de sus intervenciones en tribuna para discutir el dictamen de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2026.
Minutos después arribaron los panistas con veladoras encendidas tan grandes como un cirio que también colocaron como si fuera una ofrenda en sus curules.
El lunes, la presidenta Claudia Sheinbaum los llamó “buitres”, aunque la oposición no se achicó y por la noche acordaron llegar con las texanas teñidas de rojo, con el aval del presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno, y el líder de los diputados, Rubén Moreira.
Sobre el Plan Michoacán que anunció la presidenta, Moreira Valdez lo consideró “insuficiente, es suficiente ese programa y esto no va a funcionar, créanmelo, si los gobernadores no se asumen como tales, esto no va a funcionar si no regresan presupuesto a los municipios y a los estados. Los municipios no tienen dinero para enfrentar todo, se lo llevó el Tren Maya, es la verdad”.
Por ello, se pronunció por la renuncia del gobernador de Michoacán, Alfredo RamírezBedolla, porque “se va la insensibilidad de un gobernante que pudo haber enfrentado el crimen, que no es fácil, que seguramente iba a tener muchos problemas”.
“Pero se fue y se van con muchos gobernadores por la frivolidad, por la popularidad que da entregar cosas y dilapidar el presupuesto y le sacan la vuelta a asumir la responsabilidad de ser gobernadores, ser gobernador es mucho más que eso que hicieron ellos”, subrayó Moreira.
Gente de campo, Manzo siempre uso sombrero: en su curul como diputado federal exigió en agosto de 2023 en una plenaria de Morena que la federación investigara “a fondo y sin sesgos políticos” los presuntos nexos de funcionarios municipales y estatales con el crimen organizado.
Nadie hizo eco a su exigencia, la denuncia se perdió entre los morenistas de la legislatura pasada, como ocurrió su petición de ayuda federal, para enfrentar a la delincuencia hasta el último de sus días.
Manzo Rodríguez usó también la texana como candidato a presidente municipal de Uruapan, la cual ganó al candidato con el “Movimiento del sombrero” o “la sombreriza” con un 66% de los votos, los cuales alcanzaron para apoyar la llegada de un candidato independiente local y una diputada federal por la misma vía: Guadalupe Araceli Mendoza.
Nuevamente, el panista Döring Casar exigió la renuncia de Ramírez Bedolla porque “tú no puedes convocar a la paz y convocar a todos a sentarse con la autoridad, a dialogar para encontrar una reconciliación”.
“Cuando todo mundo cree que ese gobernador es corresponsable del abandono que le costó la vida a Carlos Manzo. Porque a Carlos Manzo lo mataron los narcos porque lo dejaron solo las autoridades de Morena”, enfatizó.
A un costado del salón de sesiones, en las escaleras que llevan a la tribuna, el PAN colocó un cuadro con una mariposa que se posa sobre una texana, que a su vez está sobre un piso desértico en el que resalta un limón.
Mientras panistas y priistas se distribuyen en el pleno, solamente hay unos cuantos legisladores de la 4T, quienes miran entre sorprendidos y casi de reojo la protesta opositora para recordar al alcalde que el gobierno federal y estatal de Morena dejó solo.
La presidenta de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, inició la sesión de este martes con el primero de tres minutos de silencio, otro por Francisco Rojas, quien Moreira recordó como presidente de la Junta de Coordinación Política, entre otros cargos.
Uno más por Elena Sánchez Algarín, directora general de proceso legislativo durante casi 60 años y 19 legislaturas consecutivas, además de las 23 personas fallecidas y más de una docena con lesiones tras el incendio en una tienda Waldo’s.
Tras el minuto de silencio por el asesinato del presidente municipal de Uruapan, el diputado de Movimiento Ciudadano gritó un “¡Que viva Carlos Manzo!” y “¡Justicia!”, que nadie secundó.

